El 18 de marzo se conmemoraron 115 de una amistad nacida al calor de una competencia.
El sábado 18 de marzo, la Cuarta Compañía “Pompe France” y la Quinta Compañía “Bomba Arturo Prat” celebraron 115 años de amistad y camaradería en una actividad denominada “La Servilleta”.
En la ocasión, los Voluntarios de la “Bomba Arturo Prat” recibieron a sus pares de la “Pompe France”, en un almuerzo lleno de recuerdos y anécdotas, que se prolongó en un intercambio de presentes y en la firma de un documento que testimonia una amistad que tuvo su origen cuando el personal de la Cuarta Compañía ganara el Premio de la Competencia de 1907.
El origen
Sobre esta tradición, el Director de la “Bomba Arturo Prat», Jerónimo Carcelén Pacheco señaló: “En un ambiente de amistad y camaradería, 100 voluntarios de la 4ª y la 5ª, de distintas generaciones, se reunieron para recordar ese premio que consistía en una carrera de gallos y armada de pitones, que fue ganado por la ‘Pompe France’ con un tiempo de 4’40”, llegando la 5ª en segundo lugar con 4’50”. Terminada la competencia de 1907, los quintinos hicieron llegar una servilleta firmada a los dignos triunfadores”.
El Director Carcelén recordó que “si bien la servilleta se destruyó en el incendio de 1967, su espíritu siguió ahí y ambas compañías se reunen cada 5 años a recordar dicha competencia y así renovar una amistad que se vive en las competencias pero también en el servicio”.
Agregó que “La Servilleta se convirtió en una tradición porque más allá de la fraternal competencia en la cancha, en estos 115 años ha existido colaboración y trabajo conjunto en los actos de servicio, lo que genera lazos de amistad entre nuestros voluntarios”.
La tradición y el servicio
A su vez, el Director de la “Pompe France”, Alonso Segeur Lara, expresó que “La Servilleta es una hermosa tradición que se funda en la amistad y espíritu que debe primar en las competencias. La Quinta hizo suyo el triunfo cuartino de la primera competencia de 1907 y firmó una servilleta espontáneamente para regalar a la ‘Pompe France’”.
Y finalizó: “Desde hace 115 años que se mantiene esta tradición bomberil arraigada en la amistad y en fortalecer cada día más los lazos que nos permiten no sólo convivir mejor, sino también trabajar mejor en el servicio activo”.
Los presentes
Un digno colofón para la tradicional relación de camaradería fue el intercambio de presentes. En la oportunidad, la Cuarta obsequió a la Quinta una representación de los uniformes que ha usado en el tiempo; y, viceversa, la Quinta, una réplica a escala de su bomba automóvil Delahaye Farcot, que entró en servicio en 1913.