Con un lugar especial para la pieza de Material Mayor, los Voluntarios y Voluntarias cierran un círculo con su historia de servicio.
La noche del martes 22 de marzo, la máquina histórica Berliet GAK-20, tras 50 años desde su puesta en servicio, regresó a su hogar inicial y definitivo en la Vigésimo Segunda Compañía del Cuerpo de Bomberos de Santiago (CBS).
Con sus balizas encendidas y haciendo sonar su sirena, el carro conducido por el Voluntario Honorario, ex Director y presidente de la comisión encargada de recuperarla y restaurarla, Alejandro Bedwell, llegó a destino.
La esperaban el Director, Cristhian Bedwell Guzmán, y el Capitán, Óscar Bahamondes, quienes recibieron las llaves de la Berliet GAK-20. Con ello se cerraba un ciclo que partió con grandes esfuerzos de los Bomberos y los vecinos de la población “Juan Antonio Ríos” a inicios de la década de los años 70, cuando la Segunda Compañía del entonces Cuerpo de Bomberos de Renca trajo dicha máquina nueva.
El paso de los años
Era noviembre de 1971 y en el curso de los años participó en los grandes incendios de la ciudad, como los de años 80 ya con el gallardete de la Vigésimo Segunda Compañía del CBS.
Los años pasaron y fue el tiempo de su baja del servicio, incorporándose a otros Cuerpos de Bomberos del país.
Otros carros nuevos llegaron, pero siempre quedó el recuerdo de la Berliet GAK-20 y la necesidad de recuperarla con fines patrimoniales. Lo que se inició en 2014, cuando se la ubicó en la ciudad de San Fernando, en la Región de O’Higgins.
“Para saber si era nuestra bomba fijamos criterios fundamentales”, cuenta Alejandro Bedwell, quien los señala: “Las claves de la Central de Alarmas deberían estar pegadas en la parte superior interna de la cabina, los pollos deberían tener unas soldaduras para que no se soltaran y en el volante debería tener el símbolo original de la Berliet”.
“Así fue, todo calzaba y comenzamos el proceso de readquirirla, que fue largo y lleno de vicisitudes, entre ellas lo económico, la agitación social y después los dos años de pandemia”, afirma Alejandro Bedwell, quien añade que “las reparaciones fue otro camino largo porque los mecánicos y tuvieron problemas de todo tipo, hasta que en septiembre de 2021 entró a un taller de San Bernardo, donde un mecánico muy bueno y responsable la dejó en excelente estado y la entregó”.
Tras ello, agrega el Bombero, “se le hizo un espacio en la Sala de Máquinas, detrás de los carros, pero merecía algo acorde a la historia y el esfuerzo que se hizo con la comunidad para comprarla nueva, para el servicio que prestó y la gestión para los que han contribuido a ubicarla y recuperarla”.
“Así es que con el apoyo de los Voluntarios y en especial de uno muy generoso, que prefiere quedar anónimo, se hizo una Sala de Máquinas especial donde ahora descansa”, añade.
– ¿Qué significa tener la GAK-20 en la Vigésimo Segunda Compañía?
– Es tener algo sagrado para los Bomberos, la máquina que nos lleva al servicio y nos trae de vuelta sanos y salvos al Cuartel. Es el ejemplo vivo que sirve para hacerles clases a los aspirantes, donde se palpa la historia de los carros y la Compañía, para que conozcan del esfuerzo de una comunidad como la población “Juan Antonio Ríos”, que nos ayudó con el esfuerzo de conseguir peso por peso para traer una máquina cero kilómetros hace 50 años. Es algo vital para mantener la mística, porque de eso se trata todo.